Si te estás planteando hacer tu erasmus en Lituania, sigue leyendo, no nos hará falta mucho para convencerte de que es un país increíble. De hecho, tan solo una palabra define perfectamente Lituania: naturaleza. Siendo uno de los países más bonitos de Europa, Lituania se presenta como un lugar que os dejará embobados con sus mágicos paisajes, con sus gentes hospitalarias y sus playas de agua bien fresquita.
Así pues, ¡descubramos Lituania!
Idioma
El idioma oficial es el lituano, hablado por el 92% de la población. Es una lengua un tanto complicada de aprender, y por ello muchas facultades recomiendan a sus futuros estudiantes que vengan un mes antes, para poder hacer algunos cursos de lituano (totalmente gratuitos) e ir adquiriendo una base del idioma.
El lituano tiene dos dialectos: el aukštaitiano y el samogitiano.
Por otro lado, la mayoría de los lituanos, un 80%, también habla ruso y dado que el inglés es un idioma obligatorio en la escuela gran parte de la población joven, un 80%, habla y domina también este idioma.
Sabemos que con el lituano está un poco más difícil pero con el inglés podrás moverte como pez en el agua en este país ¡sin tener que sufrir por no poder comunicarte con sus habitantes!
Cultura
El carácter lituano es independiente y orgulloso, pero también son personas muy amables y hospitalarias. Uno de los días más populares y tradicionales de Lituania es Uzgavenes, cuya celebración hace referencia a los Carnavales de Lituania. Tienen lugar a principios de febrero y su finalidad principal es “asustar a los inviernos fríos y llamar a la primavera”, una experiencia única en la que las calles se llenan de diversión y desfiles increíbles.
En cuanto a su gastronomía, no podemos dejar de mencionar su pan de centeno negro… ¡delicioso! También sus quesos y por supuesto su miel, la cual es muy importante para los lituanos.
Su comida es reconocida a nivel internacional, basada en productos de cultivo como las patatas, las verduras y las setas. Suelen ser platos muy densos y caloríficos, pero os encantarán las combinaciones que hacen, ¡son espectaculares! Y si además las acompañamos con las salsas típicas lituanas, mejor que mejor.
Entre sus platos más típicos encontramos el Cepelinai, una pasta hecha de patata rellena de carne y acompañada por trocitos de beicon, setas y nata agria, el Kugelis, un plato con base de patata, leche, cebolla y huevo, cocinado al horno y acompañado de compota de manzana, crema agria o mermelada, o el Kepta Duona, un aperitivo hecho con pan frito y acompañado de una salsa de queso y ajo.
Teniendo en cuenta que ellos suman una hora más, su horario comercial es generalmente un poquito más corto que el nuestro, ya que empiezan sobre las 9:00h y acaban su jornada sobre las 18:30h.
En cuanto al clima, nos encontramos con uno más continental en el interior del país, y con temperaturas más suaves en la costa, bañada por el mar Báltico. Así, los inviernos son muy fríos, a veces incluso se llegan a temperaturas de hasta -30°, con nevadas que pueden alargarse 3 o incluso 4 meses.
Ocio
Como ya comentábamos al inicio, Lituania es un país increíble, lleno de lugares mágicos. Sus paisajes son dignos de visitar, sobre todo teniendo en cuenta que un tercio de Lituania son bosques, los cuales contienen más de 6000 lagos.
Así pues, no os aburriréis en vuestro tiempo libre puesto que tendréis mil lugares a visitar.
Lugares como Vilna la capital, una ciudad pequeña donde todo su casco antiguo es considerado patrimonio de la humanidad. Calles de adoquines, sus cafés, sus restaurantes, la Catedral de Vilna y en verano, ¡mucho ambiente universitario!
Kaunas es también una ciudad con mucha personalidad y activa sobre todo en verano. En ella se celebran muchos festivales culturales o musicales y podréis disfrutar de su maravilloso casco antiguo. No os olvidéis de pasar por la calle Vilniaus, la más antigua de la ciudad y en la que encontrarás mucho ambiente debido a sus restaurantes, cafés y sus tiendas de souvenirs.
Cerca de la capital veréis la ciudad de Trakai, uno de los destinos más populares por los turistas. Forma parte del Parque Histórico Nacional, el cual posee un lago impresionante con un castillo medieval precioso en el centro, utilizado en la actualidad como sede de conciertos y exposiciones.
También os recomendamos que visitéis Palanga, donde podréis disfrutar del Mar Báltico y relajaros en sus playas de arena fina. Por cierto, no os vayáis de allí sin pasar por la calle Basanavicius, es la vía principal de la ciudad, un paseo repleto de bares, cafeterías, pubs y ¡mucha música!
Y si lo que buscáis es un lugar para la relajación y la desconexión, Druskininkai, es el lugar ideal. Popular por los tratamientos en manantiales de aguas minerales y por su entorno natural.
Coste de vida
Uno de los motivos más importantes a la hora de decidirnos por un país es el coste de vida. Y en este sentido, Lituania se lleva muchos puntos. Es un país en el que se puede vivir bien con mucho menos de lo que necesitaríamos en nuestro país. Por ejemplo, en Lituania podréis comprar el pan con alrededor de 50 céntimos, comer en un restaurante por 7 euros o ir en transporte público por 1 euro.
Estudios
Destacaremos dos universidades entre todas las que ofrece Lituania: Vilniaus Universitetas, la más antigua del país y Mykolo Romerio Universitetas, la que dispone de más estudiantes. Ingeniería Civil, Medicina, Física, Ciencias Económicas… tendréis muchas opciones que se adaptarán a vuestras necesidades. Y por supuesto, no os preocupéis por el idioma porque las clases se imparten en inglés.
Alojamiento
Como ya hemos comentado, Lituania es un país relativamente asequible para vivir, económicamente hablando. Así, no tendréis mucho problema en encontrar alojamiento con un precio razonable. Algo que os permitirá invertir más en otras cosas del día a día como en ocio, comida, cursos, etc.
Así, y para que os hagáis una idea, un piso de una habitación en el centro puede costaros poco menos de 400 euros y si nos vamos a 3 habitaciones, también en el centro, puede subir hasta los 650 euros aproximadamente.
Como siempre, esta es la opción más cara, pero siempre tendréis la posibilidad de optar por una residencia de estudiantes o incluso por compartir piso.
¿Qué nos decís? ¿Vuestro erasmus será en Lituania? 😉
